En abril, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley que declara el 12 de junio como el Día Contra el Trabajo Infantil, en concordancia con la conmemoración mundial. La Red Parlamentaria de Defensa de la Niñez aguarda la aprobación de una norma nacional que determine cuáles son las 23 peores formas de trabajo infantil en el país, para tomar acciones en ese sentido.

“Son trabajos que tienen que ver con la zafra, las actividades relacionadas con la castaña, la minería, entre otras. A partir de la aprobación (de esta normativa) se deberá regular estas actividades. De momento estamos trabajando en coordinación con el Ejecutivo”, informó David Cortés, diputado y miembro de la mencionada organización legislativa.

Pero el trabajo infantil es una realidad que se vive diariamente en Bolivia. Mientras unos lo condenan, muchos niños y adolescentes se sienten agradecidos por tener fuentes de ingresos.

A sus 16 años, Israel tiene una amplia lista de oficios en su “currículum”. Ha sido ayudante de cocinero, de carpintero y negociante desde los ocho años. Actualmente pertenece a la Casa de Paso del hogar Arco Iris.

“¿No te hubiera gustado estudiar en vez de trabajar?”, se le consulta. “No podía hacerlo, debía trabajar para mantenerme a mí y a mi abuelita. Estuve en las drogas y en varios hogares que no me gustaron, porque otros chicos eran abusivos conmigo. Ahora he vuelto a estudiar y quiero ser chef, además hago manillas y objetos de carpintería”, responde con orgullo.

A sus siete años, Alan -ahora de 14- ya vivía en la calle porque le maltrataban en su casa. Fue voceador y hasta ladrón, confiesa. “Al principio no te gusta, luego te acostumbras y volver a la disciplina de un hogar no es fácil”, afirma el adolescente, cuya aspiración es ser psicólogo.

José Manuel dice que también sabe de maltrato. A sus cinco años dejó su casa debido a que, cuenta, sus familiares le golpeaban. Hoy tiene 16.

“Robaba, no sabía hacer nada, luego fui ayudante de pastelero y los de la Alcaldía me sacaron de ahí y me llevaron a un hogar (de Paso)”, cuenta.

La diputada María Sempértegui, miembro de la red parlamentaria, indicó que el proyecto del Código de Trabajo Infantil actualmente es trabajado con el Ministerio de Trabajo.

“A partir de la declaratoria de la ley, que declara al 2012 como Año de la No Violencia Contra la Niñez y la Adolescencia, se trabaja en varios proyectos que pretenden ser regulados a través de otras normativas”, declaró.

Sin embargo, en varias ciudades del país existen asociaciones de jóvenes trabajadores que buscan reconocimiento para su actividad laboral.

Al respecto, la diputada Wilma Quiroz dijo: “Tenemos que trabajar en las diferentes situaciones en las que se origina el trabajo infantil. Lo importante es que no sean objeto de abuso, maltrato o explotación, sino que puedan ejercer sus derechos”.