Los dos hinchas chilenos acusados de cortar la tricolor nacional, antes del partido entre las selecciones de Bolivia y Chile, por las Eliminatorias, fueron liberados ayer, tras ser aprendidos el sábado, porque la Fiscalía no encontró pruebas suficientes.
La jueza cuarto de Instrucción en lo Penal, Margot Pérez, dispuso ayer la libertad de los dos ciudadanos chilenos sindicados de romper la bandera boliviana.
Según ERBOL, la decisión de la jueza fue tomada por falta de presentación de la imputación contra los extranjeros de parte del Ministerio Público. La fiscal asignada a las investigaciones, Virginia Marín Montoya, dijo que los chilenos no fueron capturados en flagrancia por los efectivos policiales .
“Según el informe policial, cortaron la bandera nacional que cayó a la bandeja baja (de la general), pero teníamos sólo el informe y pasamos a la autoridad jurisdiccional para que determine la situación legal de ambos chilenos, simplemente puedo decir que no hubo detención en flagrancia, deberíamos tener algunos elementos más”.
Montoya apuntó que el Ministerio Público pidió a la jueza la determinación de la situación legal de los chilenos conforme a sus atribuciones y el artículo 228 del Código de Procedimiento Penal.
No se pidió la detención preventiva de ambos, cuyo nombres no se dieron a conocer, “porque no habían suficientes elementos de convicción para atribuirles el hecho y el caso no fue en flagrancia”, justificó.
Entre tanto, uno de los responsables de la seguridad del Siles, en el encuentro del sábado, coronel Juan Carlos Gallo, informó que los aficionados trasandinos fueron aprendidos por los cargos de ultraje a los símbolos nacionales, “que es un delito”.
El jefe de seguridad de la Federación Boliviana de Fútbol, Víctor Hugo González, dijo que pedirá que “en el futuro se reúnan a los hinchas de las selecciones rivales en un solo sector. El sábado había aficionados chilenos en los cuatro sectores y eso no permite un mejor control. Pediremos una mejor coordinación con los patrocinadores de la Selección”.
La tricolor, de más de 30 metros, fue extendida por ENTEL.
La jueza cuarto de Instrucción en lo Penal, Margot Pérez, dispuso ayer la libertad de los dos ciudadanos chilenos sindicados de romper la bandera boliviana.
Según ERBOL, la decisión de la jueza fue tomada por falta de presentación de la imputación contra los extranjeros de parte del Ministerio Público. La fiscal asignada a las investigaciones, Virginia Marín Montoya, dijo que los chilenos no fueron capturados en flagrancia por los efectivos policiales .
“Según el informe policial, cortaron la bandera nacional que cayó a la bandeja baja (de la general), pero teníamos sólo el informe y pasamos a la autoridad jurisdiccional para que determine la situación legal de ambos chilenos, simplemente puedo decir que no hubo detención en flagrancia, deberíamos tener algunos elementos más”.
Montoya apuntó que el Ministerio Público pidió a la jueza la determinación de la situación legal de los chilenos conforme a sus atribuciones y el artículo 228 del Código de Procedimiento Penal.
No se pidió la detención preventiva de ambos, cuyo nombres no se dieron a conocer, “porque no habían suficientes elementos de convicción para atribuirles el hecho y el caso no fue en flagrancia”, justificó.
Entre tanto, uno de los responsables de la seguridad del Siles, en el encuentro del sábado, coronel Juan Carlos Gallo, informó que los aficionados trasandinos fueron aprendidos por los cargos de ultraje a los símbolos nacionales, “que es un delito”.
El jefe de seguridad de la Federación Boliviana de Fútbol, Víctor Hugo González, dijo que pedirá que “en el futuro se reúnan a los hinchas de las selecciones rivales en un solo sector. El sábado había aficionados chilenos en los cuatro sectores y eso no permite un mejor control. Pediremos una mejor coordinación con los patrocinadores de la Selección”.
La tricolor, de más de 30 metros, fue extendida por ENTEL.
Página Siete
No hay comentarios:
Publicar un comentario