La Paz, 29 de marzo.- Quince años después de la llamada "Guerra del Agua" y doce años después de la "Guerra del Gas", el Movimiento al Socialismo (MAS), partido beneficiario de ambos procesos, ha perdido el control de los municipios que detonaron esas rupturas. El Alto y Cochabamba fueron las ciudades que en 2000 y 2003 marcaron los grandes virajes en la Historia reciente de Bolivia. Fueron también las primeras ciudades grandes en las que el MAS logró capitanear las alcaldías por primera vez. Ni el dirigente sindical Edgar Patana ni Edwin Castellanos, que desitió de la contienda, tomarás más las decisiones allí.
No se trata de un cambio menor. Los nuevos alcaldes de El Alto y Cochabamba pertenecen a partidos que el MAS considera de "derecha". En la urbe alteña, Soledad Chapetón de Unidad Nacional (UN) se convierte en la primera mujer al mando del municipio. En la provincia de El Cercado, el abogado José María Leyes del Movimiento Demócrata Social (MDS), el partido de Rubén Costas, será el nuevo burgomaestre.
Por si fuera poco, dos prominentes disidentes del MAS, Félix Patizi en el departamento de La Paz y Damián Condori, en Chuquisaca, han mostrado que el llamado voto duro del partido de gobierno es en realidad un contingente crítico, capaz de discernir entre el liderazgo de Evo Morales y el de sus representantes locales.
ANF
No hay comentarios:
Publicar un comentario