ERBOL hizo un recorrido por las calles de Challapata y la feria de autos chutos en esta localidad del departamento de Oruro, donde pudo constatar que la venta de vehículos indocumentados continúa en igual e incluso mayor magnitud que en la época de la amnistía de 2011.
En las calles de Challapata no es novedad encontrar a cada paso vehículos sin placa de control estacionados en las puertas de las viviendas o en plena circulación, incluso algunos prestando servicio masivo de transporte público y de taxi.
La principal feria de autos chutos (indocumentados) se realiza los sábados y domingos al menos en unas ocho cuadras a la redonda con gran afluencia de los comerciantes que venden y compran centenares de vehículos. “Uuuuuhh esto es así de llenito, harta gente viene a comprar los chutos”, dijo un poblador de esta localidad.
“Hay gran cantidad (de autos chutos), esto será pues la más grande auto venta de Bolivia, la gente ahora más está comprando”, añadió uno de los vendedores, que ofrecía vehículos marca Toyota Hilux, Ipsum, a partir del modelo 98, recién llegados desde Chile.
Los pobladores de Challapata y sobre todo vendedores de los autos chutos son extremadamente susceptibles ante la presencia de cualquier medio de comunicación o persona ajena a ellos, por lo que este se logró conversar con algunos de las personas del lugar con mucha cautela y en anonimato.
Una tercera fuente afirmó “los compradores de estos autos siguen llevando, no sé qué pasará, por desvíos siguen sacando igual, cómo harán para vender (en otras regiones del país), pero igual nomas compran de aquí harto”.
Otro vendedor, que ofrecía un auto Toyota Ipsum modelo 98 a 4.600 dólares (ofertable), dijo: “Cada semana entran mínimo 100 autos, igual como antes (de la última nacionalización), por eso la feria está lleno (de chutos), los policías no pueden hacer nada, cómo van a quitar tantos chutos”.
El mismo vendedor aseguró que si comprábamos el auto que ofrecía, se encargaría de conseguirnos un chofer para que en horas de la noche traslade el motorizado a otro departamento y a la vez orientarnos cómo podríamos falsificar documentos.
Vanos fueron los intentos para encontrar un vehículo a la venta con los papeles o documentos en orden. “Solo podemos darte una boleta de compra del vehículo en Chile, chuto es no ve, no hay más papeles, también puedes comparar papeles chutos, placas, roseta, todo hay aquí”, dijo otro vendedor, ante la insistencia de este medio sobre algún documento que acredite la legalidad de uno de los motorizados en venta.
Rumores de otra nacionalización
Para varios de los vendedores y compradores de vehículos chutos, se podría dar una nueva nacionalización de vehículos indocumentados en un mediano plazo. “Va haber (otra nacionalización), de aquí a un año, dos años o a más tardar tres años, no será ahorita, pero va ver”, aseguró el vendedor que nos ofreció el Toyota Ipsum a 4.600 dólares.
En la misma línea, un comprador que dijo ser de Cochabamba acotó: “Habrá (otra nacionalización) de aquí a unos tres o cinco años, según hablan van a nacionalizar cuando vengan hacer sus campañas, hay piden pues votos…”.
Un último vendedor que accedió a conversar reservar en anonimato, contó que en el proceso de nacionalización de autos chutos, la venta bajó considerablemente, pero sólo por algo más de un mes, porque otra vez “ya no hay controles estrictos en la frontera, por eso (la oferta y la demanda de estos) autos nuevamente ha subido, como verás aquí hay a patadas autos de todo precio, si entras a los garajes puedes sorprenderte más”.
“La policía no puede hacer nada”
Todas las fuentes consultadas acerca del rol de los efectivos de la Policía Boliviana coincidieron en asegurar que “no pueden hacer nada” frente al masivo movimiento de autos chutos en esta localidad orureña. “Aquí no viene la policía, a la policía les hacen corretear”, dijo entre risas uno de los pobladores de la localidad.
“Cuando la COA los agarra (a los importadores de chutos), se comunican rápido, llaman con petardos y directo los comunarios se reúnen y les hacen escapar a los policías, la policía no puede hacer nada”, ratificó un jovenzuelo que dijo vivir en una comunidad cercana y aseguró haber visto en muchas oportunidades el accionar de los chuteros organizados.
La muestra clara de la no presencia de la Policía es la continua venta de vehículos, placas y documentos falsificados, rosetas y también gasolina por galones “aquí se vende al aire libre los autos, no jode nadie, la policía no entra, zona roja es, por eso hasta se vende gasolina, llenito es la feria como ves, no hay ni espacio”, apuntó el jovenzuelo.
En las calles de Challapata no es novedad encontrar a cada paso vehículos sin placa de control estacionados en las puertas de las viviendas o en plena circulación, incluso algunos prestando servicio masivo de transporte público y de taxi.
La principal feria de autos chutos (indocumentados) se realiza los sábados y domingos al menos en unas ocho cuadras a la redonda con gran afluencia de los comerciantes que venden y compran centenares de vehículos. “Uuuuuhh esto es así de llenito, harta gente viene a comprar los chutos”, dijo un poblador de esta localidad.
“Hay gran cantidad (de autos chutos), esto será pues la más grande auto venta de Bolivia, la gente ahora más está comprando”, añadió uno de los vendedores, que ofrecía vehículos marca Toyota Hilux, Ipsum, a partir del modelo 98, recién llegados desde Chile.
Los pobladores de Challapata y sobre todo vendedores de los autos chutos son extremadamente susceptibles ante la presencia de cualquier medio de comunicación o persona ajena a ellos, por lo que este se logró conversar con algunos de las personas del lugar con mucha cautela y en anonimato.
Una tercera fuente afirmó “los compradores de estos autos siguen llevando, no sé qué pasará, por desvíos siguen sacando igual, cómo harán para vender (en otras regiones del país), pero igual nomas compran de aquí harto”.
Otro vendedor, que ofrecía un auto Toyota Ipsum modelo 98 a 4.600 dólares (ofertable), dijo: “Cada semana entran mínimo 100 autos, igual como antes (de la última nacionalización), por eso la feria está lleno (de chutos), los policías no pueden hacer nada, cómo van a quitar tantos chutos”.
El mismo vendedor aseguró que si comprábamos el auto que ofrecía, se encargaría de conseguirnos un chofer para que en horas de la noche traslade el motorizado a otro departamento y a la vez orientarnos cómo podríamos falsificar documentos.
Vanos fueron los intentos para encontrar un vehículo a la venta con los papeles o documentos en orden. “Solo podemos darte una boleta de compra del vehículo en Chile, chuto es no ve, no hay más papeles, también puedes comparar papeles chutos, placas, roseta, todo hay aquí”, dijo otro vendedor, ante la insistencia de este medio sobre algún documento que acredite la legalidad de uno de los motorizados en venta.
Rumores de otra nacionalización
Para varios de los vendedores y compradores de vehículos chutos, se podría dar una nueva nacionalización de vehículos indocumentados en un mediano plazo. “Va haber (otra nacionalización), de aquí a un año, dos años o a más tardar tres años, no será ahorita, pero va ver”, aseguró el vendedor que nos ofreció el Toyota Ipsum a 4.600 dólares.
En la misma línea, un comprador que dijo ser de Cochabamba acotó: “Habrá (otra nacionalización) de aquí a unos tres o cinco años, según hablan van a nacionalizar cuando vengan hacer sus campañas, hay piden pues votos…”.
Un último vendedor que accedió a conversar reservar en anonimato, contó que en el proceso de nacionalización de autos chutos, la venta bajó considerablemente, pero sólo por algo más de un mes, porque otra vez “ya no hay controles estrictos en la frontera, por eso (la oferta y la demanda de estos) autos nuevamente ha subido, como verás aquí hay a patadas autos de todo precio, si entras a los garajes puedes sorprenderte más”.
“La policía no puede hacer nada”
Todas las fuentes consultadas acerca del rol de los efectivos de la Policía Boliviana coincidieron en asegurar que “no pueden hacer nada” frente al masivo movimiento de autos chutos en esta localidad orureña. “Aquí no viene la policía, a la policía les hacen corretear”, dijo entre risas uno de los pobladores de la localidad.
“Cuando la COA los agarra (a los importadores de chutos), se comunican rápido, llaman con petardos y directo los comunarios se reúnen y les hacen escapar a los policías, la policía no puede hacer nada”, ratificó un jovenzuelo que dijo vivir en una comunidad cercana y aseguró haber visto en muchas oportunidades el accionar de los chuteros organizados.
La muestra clara de la no presencia de la Policía es la continua venta de vehículos, placas y documentos falsificados, rosetas y también gasolina por galones “aquí se vende al aire libre los autos, no jode nadie, la policía no entra, zona roja es, por eso hasta se vende gasolina, llenito es la feria como ves, no hay ni espacio”, apuntó el jovenzuelo.
Erbol
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