Practicar una disciplina marcial como el taichi puede ayudarle a reducir los efectos del estrés laboral, así lo manifiesta Alejandra Pezoa, maestra de esta terapia que se imparte en el centro Vivir Feliz en Santa Cruz.
Según la explicación de la experta, el taichi es un arte marcial, "hay que partir de esa base, no es una gimnasia suave, no es un baile bonito, no es solamente sentarse y relajarse, es un arte marcial que aplicamos a nuestra vida para la armonía en un mismo cuerpo, mente y espíritu", señala.
Reconocer qué nos enferma. Cabe resaltar que esta terapia reconoce que el cuerpo no está separado de la mente, según la experta. "El taichi ayuda a reconocer qué nos está enfermando, después que reconocemos sabemos encauzar esas emociones con ejercicios, técnicas de respiración y más allá con meditación", añade.
A través de la práctica se reconoce sentimientos y emociones que dominan y enferman el cuerpo, "en el caso del trabajador vienen las tensiones en el área del cuello, hombros, área lumbar, espalda baja, dolores de cabeza, migrañas severas y problemas digestivos, porque nuestras emociones están descontroladas y es ahí que el taichi trabaja", indica Pezoa.
El momento adecuado. La explicación apunta que esta terapia puede ser aplicada en un mínimo de dos veces a la semana y en el caso del trabajo media hora es suficiente. "Quienes trabajan incluso lo pueden aplicar en horarios de trabajo con la respiración adecuada en los momentos tensos, basta unos segundos para respirar profundo según las enseñanzas del taichi para despejar la mente y volver a su trabajo y encontrar la solución que se busca", comenta.
Resultados visibles. El hecho de aplicar el taichi al trabajo puede tener grandes resultados con el cambio en el entorno laboral. "La persona aprende a reconocer sus limitaciones, se vuelve más activa, menos asertivas y crea un ambiente laboral más positivo y armónico", concluye.
Según la explicación de la experta, el taichi es un arte marcial, "hay que partir de esa base, no es una gimnasia suave, no es un baile bonito, no es solamente sentarse y relajarse, es un arte marcial que aplicamos a nuestra vida para la armonía en un mismo cuerpo, mente y espíritu", señala.
Reconocer qué nos enferma. Cabe resaltar que esta terapia reconoce que el cuerpo no está separado de la mente, según la experta. "El taichi ayuda a reconocer qué nos está enfermando, después que reconocemos sabemos encauzar esas emociones con ejercicios, técnicas de respiración y más allá con meditación", añade.
A través de la práctica se reconoce sentimientos y emociones que dominan y enferman el cuerpo, "en el caso del trabajador vienen las tensiones en el área del cuello, hombros, área lumbar, espalda baja, dolores de cabeza, migrañas severas y problemas digestivos, porque nuestras emociones están descontroladas y es ahí que el taichi trabaja", indica Pezoa.
El momento adecuado. La explicación apunta que esta terapia puede ser aplicada en un mínimo de dos veces a la semana y en el caso del trabajo media hora es suficiente. "Quienes trabajan incluso lo pueden aplicar en horarios de trabajo con la respiración adecuada en los momentos tensos, basta unos segundos para respirar profundo según las enseñanzas del taichi para despejar la mente y volver a su trabajo y encontrar la solución que se busca", comenta.
Resultados visibles. El hecho de aplicar el taichi al trabajo puede tener grandes resultados con el cambio en el entorno laboral. "La persona aprende a reconocer sus limitaciones, se vuelve más activa, menos asertivas y crea un ambiente laboral más positivo y armónico", concluye.
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