El presidente Evo Morales aseguró que el jefe del Movimiento Sin Miedo (MSM), Juan del Granado, se quedó callado durante la masacre de octubre de 2003, porque se habría aliado en 1999 con el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) para llegar a la Alcaldía paceña. El aludido respondió que líder del Movimiento Al Socialismo estaba de vacaciones durante los luctuosos hechos de hace 10 años.

Durante el acto de promulgación de la Ley que declara a cada 17 de octubre como ‘Día de la Dignidad Nacional’, el primer mandatario increpó a la coalición de hace diez años, compuesta por el NFR, MIR y MNR. Además lanzó duros cuestionamientos a su exaliado “sin miedo”.

“Juan Del Granado no dijo nada en esos días (de octubre), nada, absolutamente nada,¿y por qué había sido? Yo no sabía y tal vez estamos olvidando. El año 1999 el Movimiento Sin Miedo tuvo un acuerdo con el MNR (…), con el voto del MNR, Juan Del Granado fue alcalde de La Paz y antes fue diputado de Goni (Gonzalo Sánchez de Lozada) en su primera gestión”, sostuvo.

Ante esa aseveración, Del Granado afirmó que él no estaba de vacaciones durante la masacre de 2003, como lo habría estado Morales.

“Yo estuve en La Paz, yo estuve en el país, no estuve de viaje, no estuve de vacaciones y por eso decirle al inquilino del Palacio, no tiene sentido mentir, no tiene sentido desinformar. Yo estuve en las calles, estuve reunido clandestinamente con Abel Mamani (…) debemos decir que este gobierno ha traicionado a la ciudad de El Alto”, aseveró Del Granado.

ONU aboga para que no vuelva a suceder un nuevo ‘octubre negro’

La coordinadora Residente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Bolivia, Katherine Grisby, abogó para que en el país no se vuelva a registrar un periodo tan conflictivo como la ‘guerra del gas’ de octubre de 2003. Tildó a los hechos como dolorosos y recomendó al actual gobierno precautelar los derechos de la población.

Respetando la soberanía de la nación y también de Estados Unidos (EEUU), no quiso emitir un criterio a favor o en contra de la extradición de Gonzalo Sánchez de Lozada. También dijo que las muertes y heridos que dejaron las protestas quedan en la historia.

“Fue un periodo sumamente difícil, en donde realmente se dieron un conjunto de contradicciones (…) En este momento hay una lucha de los movimientos sociales por la no vulneraciones de sus derechos legítimos y efectivamente es una etapa de la historia de Bolivia que todos apostamos a que no se repita”, declaró la funcionaria.