Consejos para ser un padre chancletudo

Luis Fernando ha llegado a tener cuatro hijas en un abrir y cerrar de ojos, según él buscando el varoncito que al final nunca llegó. Situación que le ha llevado a ganarse el apodo de "Chancletudo". Sin embargo, considera que asumió positivamente la bendición de ser padre de cuatro hermosas hijas, por ello junto a su esposa dicidieron aceptar la voluntad de Dios y ya no tener más hijos.

Sociedad machista. En Bolivia, según la psicóloga terapeuta Martha Heredia, todavía se da con fuerza el machismo, por lo que muchos varones valoran más tener un hijo que una hija. Se dan casos en que al recibir el anuncio del ecografista o ginecólogo, que les informa que el ser que va a nacer es mujercita, el esposo se enoja, y hecha la culpa a su pareja. “Esto es un indicador de ignorancia, ya que son los cromosomas del varón los que determinan el sexo del nuevo ser”, aclaró.

Planificación familiar. En cuanto a la planificación familiar, Heredia considera que se ha avanzado bastante en los últimos años, particularmente en las zonas urbanas. "La mujer conoce de métodos de planificación familiar y "trata" de tener el número de hijos deseados. En las zonas rurales, el desconocimiento de métodos de planificación, los bajos ingresos económicos, influyen para que la pareja no planifique adecuadamente", acotó. Sin embargo, son pocos los casos en que buscando el hijo varón la pareja pueda llegar a tener más de 4 hijos, aclaró.

Cómo asumirlo. Por otra parte, indicó que las parejas no se separan ni tienen "conflictos graves" por el hecho de tener hijos solo varones o solo mujeres. Generalmente una vez que nace el bebé, y es una mujercita, el padre brinda su afecto a este nuevo ser. “Lo importante es que la pareja quiera al nuevo hijo que va a llegar sin importar el sexo que tenga, agradecer a Dios que sea sano, y si no lo fuera o tuviera alguna discapacidad juntar fuerzas para criarlo, porque ese niño o niña necesita más aún de sus dos padres", aconsejó.

Casos patológicos. Sin embargo, pueden ocurrir algunos casos patológicos, donde el padre, por ejemplo, agreda a sus hijas, lo que necesitaría un tratamiento terapéutico lo más pronto posible.

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