Envejecer es todo un arte, involucra ir reconociendo los cambios físicos, psicológicos y ambientales adaptándose a las modificaciones y asumir tanto las victorias como las derrotas de la vida. Sin embargo, la psiquiatra Alexandra Terrazas Landivar, indica que hay personas que tienen miedo a envejecer, debido a que asocian esta etapa de la vida con la muerte, ideas negativas como el temor a perder lo que se ha logrado, la belleza, el trabajo, la familia, la salud o simplemente lo desconocido que vendrá.

Derribar mitos. En ese sentido, Víctor Hugo Rojas, médico psiquiatra del Centro de Salud Mental, indica que para vencer el miedo a envejecer lo primero es derribar los mitos. "Se asume que los de la tercera edad son personas inútiles, aspecto que no es cierto y que viene de la parte cultural de nuestra sociedad", indicó. Si bien la persona enfrentará cambios físicos y psíquicos, no es real que envejecer sea sinónimo de demencia, impotencia sexual, incapacidad física, pérdida de capacidades intelectuales, soledad, inutilidad, etc. Es una etapa de la vida que será vivida según la expectativa que la persona tenga de ella.

Características. Las personas que se niegan a envejecer sufren de ansiedad. En los hombres, indica Rojas, se puede ver un cambio de actitud, salen más seguido, tienen citas con mujeres más jóvenes, tienden a consumir bebidas alcohólicas, siendo actitudes riesgosas para ellos. Por su parte, en las mujeres sus conductas van más dirigidas a la parte corporal. "Ingieren más vitaminas, se tiñen el cabello, acuden a las cirugías plásticas y numerosos tratamientos de belleza", acotó. A esto, Terrazas agrega, que los más afectados por este tipo de fobia son quienes viven o vivieron en función de su apariencia física.

Consejos para recibir la vejez. Antes que nada hay que reeducarnos para asimilar la vejez como un proceso natural de la vida. Terrazas afirma que envejecer es un arte, y que está relacionado con diferentes actividades entre ellas el ejercicio físico moderado y sistemático, alimentación equilibrada con frutas y verduras, leer o realizar actividad intelectual frecuentemente, conocer y reconocer las emociones, buscar el desarrollo personal, solucionar los conflictos internos y temores con respecto al envejecimiento. Por otra parte, Rojas, comenta que en nuestro país se confía mucho en los hijos, los papas son muy desprendidos de sus cosas materiales, y al final puede que los hijos terminen metiéndolos en un asilo. "Cada persona debe tener un respaldo propio y de seguridad para su vejez", aconsejó.

Casos camuflados. Un paciente que sufre de gerontofobia, no acude a la consulta diciendo tengo miedo a envejecer, sino que se caracteriza por ser ansioso, histérico o narcisista. Debido a la sobrevaloración que hacen de los bienes materiales y del logro de las metas, experimentan problemas para lidiar con la pérdida de la belleza, el poder, la seducción y las riquezas, entre otros.