Semana Santa, Jesús y Bolivia

La Semana Santa es un tiempo que debe servir para la reflexión a cerca de las enseñanzas de Jesús y la importancia del nuevo pacto de Dios con el hombre cuyo único requisito es creer sin ver, amar al enemigo como a uno mismo.

En torno a esta reflexión el Teólogo, Cristian rojas sostiene que en cristología se habla del Cristo histórico y el resucitado que viene a ser la misma persona, es el mismo Jesús que resucitó y está en gloria y precisamente este misterio viene del abajamiento de Jesucristo.

Dijo que Jesús es Dios mismo hecho hombre y tiene una vida pública que corresponde a esa etapa que se denominó el Cristo histórico, porque realiza su vida pública, manifiesta los signos del reino de Dios, va a la cruz, ofrece subida, su sangre que es para nosotros redención, salvación, pero no queda ahí, sino, muere y resucita y vuelve a subir a la gloria, al padre.

Todo este ciclo, el abajamiento, la vida pública y la resurrección a la gloria es el Cristo histórico el mismo que resucitó y está presente en los sacramentos, en su iglesia y la eucaristía, anotó.

Consultado sobre la legitimidad histórica, respondió que sí, en el pasado todo era simplemente fe y había que creer por el dogma. Gracias a los avances de la arqueología, de los estudios bíblicos, de la palabra, de los libros de la Biblia, se llegó a conocer mucho más en la historia, en el tiempo.

Fueron descubiertos unos escritos en 1946, denominados los Rollos del Mar Muerto, que nos confirman la historicidad: de los libros bíblicos, de los evangelios, de la presencia de Jesucristo, los datos que señala la Biblia, todo enriqueció el conocimiento de la fe y es importante para el católico, cristiano conocer esta parte histórica, mencionó.

Subrayó que no debemos quedarnos en la historia, se debe trascender, como Cristo, a la gloria.

A la pregunta del cuestionamiento sobre la existencia de Jesús, rojas manifestó que siempre la fe tiene que llevarnos hacia la trascendencia del ser porque se puede tener una fe superficial porque unos quieren creer viendo como Tomás, quien debió tocar las heridas del Cristo.

Dichosos los que sin ver creen, esa es la fe, Jesús está en gloria, resucitó, está en su iglesia, en nosotros, los sacramentos. Como dice Pablo, por fe vive el hombre, enfatizó, es la misma fe que mostró el persecutor de cristianos, Saulo de Tarso que creyó sin conocer a Dios, tampoco a Jesús, explicó

Reconoció que más que Pedro, Pablo (Saulo de Tarso) es el que hace crecer el cristianismo y lleva a Jesucristo a las naciones.

Radio Fides

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