La jueza Karina Varea, encargada del caso de asesinato de los dos periodistas alteños, determinó este viernes en audiencia pública la detención preventiva de los dos presuntos asesinos Félix Yupanqui alias "el matón quita calzón" y de Adalid Mamani alias "el botija", en el penal de máxima seguridad en Chonchocoro en la ciudad de El Alto.
La determinación que hace presumir su culpabilidad, fue asumida en base a la ropa interior de Verónica Peñasco, que fue encontrada en el domicilio de uno de los imputados y que fue reconocida por el concubino de la periodista asesinada.
"Se ha establecido varios elementos ante los cuales hemos establecido el certificado médico forense, declaraciones de testigos que han sido las pistas que iniciaron la investigación y por último se establece las evidencias materiales que fueron presentadas y determinaron que se disponga la medida, también tenemos el reconocimiento de la ropa interior por parte del concubino de la señora Verónica Peñasco, además de otras evidencias que son prendas de vestir", dijo la jueza.
Por su parte el abogado de los imputados, Guillermo Llajta, manifestó que no existen pruebas certeras que hagan presumir la responsabilidad de los detenidos, por lo cual espera que continúen las investigaciones y se pueda dar con los "verdaderos responsables".
"Es una detención indebida, tienen que atrapar al verdadero asesino, tienen que hacerlo en las próximas horas, tienen los medios con la fiscales y la policía, ratifico la inocencia de mis clientes, (la ropa interior) es una prueba que absolutamente no prueba que ellos han sido los asesinos, tampoco hubo la prueba inseminal, ni la prueba de sangre, sólo son conjeturas", sostuvo.
La audiencia de imputación, duró cerca dos horas en presencia de los familiares de los hermanos Peñasco, que exigen justicia por la muerte de sus seres queridos.
Los cuerpos de Verónica Peñasco Layme, jefa de prensa de la radio católica San Gabriel, y de su hermano Victor Hugo, periodista de radio Pachacamasa, fueron encontrados el lunes 27 de febrero pasado por sus familiares en la morgue, a dos días de haber desaparecido, la madrugada del sábado cuando iban a sus lugares de trabajo.
Los cuerpos de ambos hermanos fueron hallados a pocas cuadras de su domicilio, con "signos de haber sido cogoteados" (atraco con estrangulamiento por lo general a bordo de vehículos públicos), según testimonios de sus familiares y compañeros de trabajo.
El asesinato de los dos periodistas causó molestia y movilización por parte de la población alteña, que durante varios días protagonizó marchas de protesta en demanda de la incorporación de la pena de muerte en el Código de Procedimiento Penal, como una medida drástica para sancionar a los delincuentes.
ANF
La determinación que hace presumir su culpabilidad, fue asumida en base a la ropa interior de Verónica Peñasco, que fue encontrada en el domicilio de uno de los imputados y que fue reconocida por el concubino de la periodista asesinada.
"Se ha establecido varios elementos ante los cuales hemos establecido el certificado médico forense, declaraciones de testigos que han sido las pistas que iniciaron la investigación y por último se establece las evidencias materiales que fueron presentadas y determinaron que se disponga la medida, también tenemos el reconocimiento de la ropa interior por parte del concubino de la señora Verónica Peñasco, además de otras evidencias que son prendas de vestir", dijo la jueza.
Por su parte el abogado de los imputados, Guillermo Llajta, manifestó que no existen pruebas certeras que hagan presumir la responsabilidad de los detenidos, por lo cual espera que continúen las investigaciones y se pueda dar con los "verdaderos responsables".
"Es una detención indebida, tienen que atrapar al verdadero asesino, tienen que hacerlo en las próximas horas, tienen los medios con la fiscales y la policía, ratifico la inocencia de mis clientes, (la ropa interior) es una prueba que absolutamente no prueba que ellos han sido los asesinos, tampoco hubo la prueba inseminal, ni la prueba de sangre, sólo son conjeturas", sostuvo.
La audiencia de imputación, duró cerca dos horas en presencia de los familiares de los hermanos Peñasco, que exigen justicia por la muerte de sus seres queridos.
Los cuerpos de Verónica Peñasco Layme, jefa de prensa de la radio católica San Gabriel, y de su hermano Victor Hugo, periodista de radio Pachacamasa, fueron encontrados el lunes 27 de febrero pasado por sus familiares en la morgue, a dos días de haber desaparecido, la madrugada del sábado cuando iban a sus lugares de trabajo.
Los cuerpos de ambos hermanos fueron hallados a pocas cuadras de su domicilio, con "signos de haber sido cogoteados" (atraco con estrangulamiento por lo general a bordo de vehículos públicos), según testimonios de sus familiares y compañeros de trabajo.
El asesinato de los dos periodistas causó molestia y movilización por parte de la población alteña, que durante varios días protagonizó marchas de protesta en demanda de la incorporación de la pena de muerte en el Código de Procedimiento Penal, como una medida drástica para sancionar a los delincuentes.
ANF
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